Las navidades son las fechas más importantes del año, normalmente es el momento de la “Vuelta a casa” y muchos familiares que llevan todo el año sin verse, se juntarán, aunque este año será más complicado. No obstante, estas celebraciones siempre van acompañadas, como en la mayoría de los festejos con comidas o cenas copiosas, bebidas alcohólicas y postres muy calóricos como bombones, turrones, roscón de reyes…

¡Parece que al final lo único sano son las 12 uvas que tomamos en las campanadas de fin de año!

La principal preocupación sobre todo a posteriori es el aumento de peso (media de 3-4 Kg) que nos llevará como todos los años a establecer como propósito de año nuevo perder esos kilos que hemos acumulado. Pero… ¿no crees que sería mejor evitar ese aumento de grasa corporal durante estas fechas?

Recomendaciones para evitar aumentar de grasa durante las Navidades

Lo primero de todo es intentar llevar una alimentación y estilo de vida saludable el resto de los días no festivos. ¡Sólo tenemos 5 días festivos! Y si no cuidamos nuestra alimentación los días no festivos porque “es Navidad” probablemente aumentemos de peso.

En los días no festivos tenemos que priorizar el consumo de verduras tanto cocidas como en ensalada o en forma de cremas o purés (recuerda que la mitad de tu plato tienen que ser verduras), también legumbres y pescado (plancha, horno, vapor).



Además, es importante mantener unos hábitos de horario y de número de comidas parecida al resto del año. No te olvides de hacer deporte o ejercicio físico, salir a caminar por las mañanas, hacer rutas por el campo o juegos en familia que requirieran moverse…

De cara a los días festivos, no te saltes comidas antes de una cena copiosa, es preferible que te tomes una fruta, un vaso de agua o un yogur antes, así llegarás más saciado y controlarás mejor las raciones de comida. Además, intenta planificar tus días, si vas a tener una cena copiosa, puedes elegir tomar un almuerzo con mayor cantidad de verduras, tomar más fruta o no tomar pan.

Escucha tu cuerpo y las sensaciones de saciedad que tengas. ¡Si no tienes más hambre, no comas más! Luego te sentirás con pesadez y molestias digestivas. Si te gusta mucho la comida, guárdate o pide un tupper para comer en otro momento y así disfrutar de esa comida rica 2 veces)

No hay que dejar de comer ese plato navideño que nos gusta tanto, pero si es muy importante la cantidad o ración que comeremos. Mi recomendación es comer de cada cosa un poco, así podrás disfrutar de todo sin pasarnos en la cantidad consumida. Además, una buena estrategia al comenzar a comer es añadir a tu plato todo lo que vas a comer, así podrás ser más consciente de la cantidad.



¡Si empezamos a picotear de una cosa y otra, no tendremos ni idea de la ración de cada cosa que comeremos!

Como hemos comentado previamente, la navidad es el momento de tener esa bandeja en el salón llena de polvorones, mazapanes, turrón, bombones… ¡ESCÓNDELA! No tengas a la vista de tus ojos esas apetecibles bombas calóricas llenas de azúcares, harinas refinadas y grasas no saludables.

¡Si te gustan mucho, déjalas para momentos especiales y preferiblemente de postre en vez de entre horas!

Además, debemos tener especial cuidado con las bebidas alcohólicas, no solamente por todos los riesgos que conllevan a nivel cerebral, sino también por la gran cantidad de calorías que presentan. Al igual que los refrescos azucarados es preferible tomarlos en su versión light o zero azúcares, aunque por supuesto siempre la mejor elección de bebida será el agua. 

Por último, no te olvides que la importancia de la Navidad nunca tiene que ser la comida, sino el poder disfrutar de la compañía de tus seres queridos.

¡FELICES FIESTAS Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!